Juegas batallas con amigos, tardes mágicas de fantasía. Juegas campañas, torneos y conoces nuevos amigos y compañeros. Imaginas como los guerreros deberían actuar en batalla, como los Guerreros del Caos atacarían, como un Cañón Imperial destruye al monstruo, como debería ser el ejercito, las líneas de Infantería, la caballería de choque, el gran monstruo destructor,... Y empiezan a surgir ciertos problemas, porque el comportamiento de muchas unidades no son como deberían. La caballería es un tanque inmortal, el monstruoso gigante es de cristal, un enjambre es más efectivo deteniendo una carga que una linea de lanceros, el cañón es más preciso que un rifle de francotirador con mirilla telescópica... Y ahí llega esa mala sensación, la frustración, que hace que las unidades no se comporten en el juego como se supone que deberían, ciertas unidades sean mucho mejores que otras dentro de tu ejército. O peor aún, ejércitos mucho mejores que otros. 

Pero aún tienes esperanza que se arreglará, que la próxima edición arreglará los problemas. Pero, no es el caso. Cambian que ejército o que unidades son mejores, pero no cambia la base del problema, ejércitos muy superiores unos a otros, unidades muy superiores unas a otras y ejércitos que no se corresponden a como el trasfondo los describe. Y sigue esa frustración. O peor aún, se agrada, pues algunos libros de ejércitos no se renuevan en alguna edición, y tu ejército queda aparcado años. 

Por esta frustración, mía y de muchos otros, comencé Warhammer 8.5, allá por mediados de la 8ª edición de Warhammer, en el año 2011. Nació como una mejora al sistema de 8ª edición y tome como base los libros y sus reglas. Corrían tiempos de los Torneos ETC, que hacían el juego más equilibrado, aunque no arreglaban problemas de fondo. Con 8ª y ETC tenía una pequeña base para empezar una edición en la cual pretendía dar mayor trasfondo a los ejércitos, más opciones, escalable, más jugabilidad y mucho más equilibrio; pues sin todo ello seguiría la frustración.

Y ¿por qué habiendo sido jugador de 6ª edición elegí la 8ª como base? Pues esta pregunta es sencilla y a la vez compleja de responder. Primeramente, tome 8ª porque era la edición más reciente, porque me parecía una edición que arreglaba muchísimos problemas de la 6ª y 7ª. Es una edición donde renta los ejércitos de infantería, donde la carga tiene importancia, pero no es capital, y donde los ejércitos se comportan de la forma más realista (a mi parecer). Además, era la edición con más unidades. Aún con sus bondades, la 8ª edición tenía muchísimas cosas mal, mucho que arreglar, mucho que mejorar.

El trabajo de crear una edición completa de warhammer, aún basándote en una edición existente, es algo titánico. Sobre todo si pretendes que la edición este equilibrada. Por ello, todos los grupos que han hecho un trabajo parecido tienen todo mi respeto  y admiración. Puntuar cada unidad, cada regla, probar cada ejército, y dentro de ellos cada unidad, contra diferentes ejércitos, diferentes unidades,... Hacer estadística de resultados de combates una y otra vez (si carga uno, si lo hace el otro, si es monstruo, si tiene Resistencia 4,...). En varias épocas hemos contado con 2-5 grupos de trabajo testeando cosas, arreglando cosas a diario. Un libro de Hombres bestia tan bueno que era intratable, una unidad imposible, reglas mal planteadas, mil y una erratas, y así día a día para mejorar.
Y también es extremadamente duro seguir adelante. No entiendo porque (quizás por el trabajo que cuesta hacer una edición y conseguir jugadores) pero este mundo esta lleno de gente maleducada que te insulta o te minusvalora tu trabajo. Cuando apareció The 9th age recibía insultos casi a diario, y otras muchas fanmade nos han tratado a patadas. Creo que el respeto y la educación no hay que perderlo, que no es lo mismo que tener opiniones diferentes, la divergencia y diversidad de opiniones es buena, no la falta de respeto. Cada uno que juegue a lo que quiera, y dejad a cada uno que elija.

La verdad, creo que conseguimos hacer una unidad buenisima y muy completa en los inicios. Muy fiel al trasfondo, con suplementos muy interesantes y que permiten poder llevarte horas y más horas de juego sin cansarte. Y muy importante, tremendamente equilibrada. Los jugadores y participantes de la iniciativa de Warhammer 8.5, y yo, hemos dejado atrás la frustración que nos causaba el juego, y si vuelve en algún aspecto tenemos seguro que arreglaremos el problema. Hemos recuperado esa sensación de la boca del estomago al ver como las unidades en el campo de batalla hacen exactamente lo que deben hacer. La caballería rompiendo unidades, las filas de lanceros parando la carga, el monstruo destruyendo las filas enemigas,... Y la verdad, eso merece todo el trabajo y penurias que se pasan.

¡Pero aun nos queda muchisimo que trabajar! Hay que seguir eliminando erratas (¡malditaz errataz!), vamos a realizar u montón de suplemetos con la historia del mundo de warhammer, desde su comienzo, empezamos con "Los Tiempos de Aenarion" y seguiremos con la "Secesión". Vamos a abandonar los libros de 8ª y crear unos nuevos (empezamos con Condes Vampiro, y ahora estamos con un libro de Orcos y Goblins que esta quedando genial), y mientras lo hacemos vamos a revisar cada libro, añadir personajes y unidades.

Por último, pero no menos importante, comentaros que si queréis participar en esta iniciativa no tenéis más que contactar con nosotros, a través de Facebook, Twitter, o esta misma página. Concretamente en Facebook tenemos un grupo llamado WARHAMMER 8.5 COMUNIDAD que esta creciendo mucho y será uno de nuestros pilares. Anímate y únete a nosotros.